Nuestros sentidos son pobres, malos, pero es lo que tenemos. ¿Y por qué digo esto?, pues mejor lo explico con un ejemplo, nuestros ojos. Solo vemos a través, y gracias a ellos, una minúscula parte de todo el espectro electromagnético que existe en la naturaleza. Solo vemos las longitudes de ondas del espectro visible, que son una franja estrechísima del inmenso espectro de ondas electromagnéticas. Nuestros ojos solo detectan el verde, el rojo y el azul esto significa que nunca hemos visto el amarillo, el marrón o el naranja. Estos colores existen, pero nuestro cerebro solo puede hacerse una idea aproximada de cada uno de ellos combinando en distintas proporciones el verde y el azul. Los infrarrojos solo podemos detectarlos con el tacto, por el calor que desprenden, y eso puede ser peligroso. A las ondas de radio ni las vemos ni las notamos, pero están ahí. Y ¿cómo vemos los rayos X?, pues no los vemos. Como tampoco a los rayos cósmicos o los rayos gama que nos
Aprendiendo a narrar historias inspiradas en la ciencia y en sus protagonistas. Adicta a los libros y a los de divulgación en especial. Editora en @hypatiacafe